Retrato de Sergio Díaz-Granados

Sergio Díaz-Granados

Presidente ejecutivo CAF -banco de desarrollo de América Latina y el Caribe-

Prólogo

América Latina y el Caribe ha tenido incuestionables logros en materia de desarrollo. En el siglo pasado, la mayoría de los países de la región lograron avances significativos en términos de estabilidad macroeconómica y profundización de los mercados financieros. Asimismo, la región ha experimentado avances no menores en términos de inclusión. En las primeras dos décadas de este siglo, se ha reducido la incidencia de la pobreza en más de 10 puntos porcentuales. La mortalidad en niños menores de 5 años ha caído a la mitad y la esperanza de vida ha crecido en 14 años. Por su parte, la fracción de hogares con acceso a electricidad se ha incrementado en más de 10 puntos porcentuales, y la fracción de adultos mayores con acceso a pensiones ha aumentado en torno a 13. 

Lamentablemente, este proceso de desarrollo sigue siendo incompleto. En los últimos 70 años, el ingreso per cápita de la región se ha mantenido por debajo del 30 % del ingreso per cápita de los Estados Unidos. Asimismo, uno de cada tres latinoamericanos y caribeños continúa viviendo en situación de pobreza. Problemas estructurales como la informalidad, los limitados niveles de competencia en los mercados, las brechas de infraestructura y la debilidad de los Estados e instituciones constituyen barreras que impiden escapar a la trampa del subdesarrollo y alcanzar los objetivos de desarrollo sostenible.

Las próximas décadas presentan importantes desafíos para la región. Por un lado, el envejecimiento de la población ejercerá una creciente presión sobre los sistemas de seguridad social, con consecuencias significativas sobre las finanzas públicas. Por otro lado, enfrenta una doble transición, digital y verde. La transición digital en América Latina y el Caribe debe ser inclusiva y estratégica, priorizando la conectividad universal, el desarrollo de habilidades digitales y la modernización de sectores clave para aprovechar sus ventajas comparativas. Asimismo, la transición verde requiere una respuesta contundente, con medidas rápidas de adaptación para abordar los impactos del cambio climático, y estrategias de mitigación de emisiones donde la consideración por la inclusión y la equidad en los costos sea central.

No obstante, la doble transición digital y verde representa una oportunidad única para que los países de América Latina y el Caribe modernicen sus economías, fomenten la innovación sostenible y potencien sus ventajas comparativas, como su biodiversidad y riqueza en recursos naturales. La abundante riqueza natural de la región constituye una fabulosa palanca para alcanzar el desarrollo sostenible, impulsando sectores como el agropecuario, el turístico y el energético. La abundancia en minerales, clave para la transición energética, ofrece a algunos países de la región la posibilidad de integrarse en cadenas de valor de la energía limpia. Por su parte, el gran potencial para producir energía renovable brinda a la región la oportunidad de desarrollar un sector industrial, en un mundo donde la baja huella de carbono de los productos será una fuente de competitividad. Finalmente, la riqueza y extensión de los bosques, manglares y ecosistemas de la región son una pieza clave en la solución global al cambio climático, pues cada hectárea de bosques en pie alivia las restricciones que impone la ecuación de carbono en la economía global.

Convertir los desafíos en oportunidades requiere acceso a financiamiento y una hoja de ruta efectiva, informada por la evidencia. CAF se constituye como un aliado fundamental en ambos frentes. En el frente de financiamiento, la cartera de préstamos, inversiones patrimoniales y avales y garantías ha estado creciendo consistentemente y orientándose hacia iniciativas alineadas con la agenda de desarrollo sostenible de los países accionistas. En 2023, la cartera total superó los 34.000 millones de dólares, lo que representa un crecimiento respecto al año anterior de 9,8 %. La incorporación de nuevos accionistas y el fortalecimiento patrimonial recientemente aprobado por la Asamblea permiten proyectar que en los próximos años continuará esta dinámica de crecimiento. Además, la institución avanza en su objetivo de ser el banco verde de América Latina y el Caribe, con el compromiso de alcanzar para 2026 un 40 % de financiación verde. Al cierre de  2024, estas operaciones representan ya un 35 % de la cartera. 

Para el abordaje del segundo frente, CAF desarrolló una oferta de productos de conocimiento variada, desde instrumentos detallados de nivel sector-país que contribuyen a la priorización de programas específicos, lo que incluye los documentos de estrategia país que son el instrumento de diálogo con las nuevas administraciones de los países miembros, hasta documentos de análisis y discusión de políticas con perspectiva integradora para la región en su conjunto. El propósito del Reporte de Economía y Desarrollo (RED) es el de zanjar la brecha entre la investigación y la toma de decisiones en el ámbito público para contribuir a la formulación de políticas basadas en evidencia. Este producto consolida además una visión cercana a las necesidades y la realidad de los países de la región, cada uno con puntos de partida diferentes y en búsqueda de un propósito común que es el desarrollo y la integración de la región. Con esta edición especial para conmemorar los 20 años de nuestro reporte bandera, el RED, CAF reafirma su compromiso de aportar a nuestros países miembros desde el frente de conocimiento.La primera edición del RED, publicada en 2004 bajo el título Reflexiones para retomar el crecimiento, abordó la cuestión central de cómo lograr una senda de crecimiento sostenido, una interrogante que sigue vigente veinte años después. El crecimiento económico, la integración comercial y la transformación productiva fueron el foco de las primeras ediciones, aunque siempre promoviendo una visión integral del desarrollo. Con el tiempo, las ediciones del RED abordaron la inclusión social (educación, empleo y desigualdad) y, más recientemente, la protección ambiental y respuestas al cambio climático (desafíos globales y transición energética). Además, se exploró el fortalecimiento de las capacidades del Estado con un enfoque territorial y con ediciones específicas sobre finanzas públicas, integridad y efectividad estatal. Hoy, el RED constituye una herramienta fundamental de CAF para iniciar y sostener un diálogo fluido de políticas y brindar un insumo de conocimiento que se produce desde, por y para la región.